Defendiendo Madre de Dios

La ambición humana, disfrazada de minería ilegal, amenaza seriamente uno de nuestros mayores tesoros: los bosques amazónicos de Madre de Dios, capital de nuestra biodiversidad.

Según el Ministro del Ambiente, Dr. Antonio Brack Egg, cerca de medio millón de hectáreas de bosque están severamente amenazadas con desaparecer, de las cuales 18 mil se han convertido ya en desierto. El vertido a los ríos de mercurio, insumo fundamental para la extracción de oro, constituye otra amenaza para la biodiversidad, para los mineros y para la población rural y urbana.

Otro importante conflicto ambiental en la región es el que se da entre los mineros formales e informales en las zonas cercanas a la Reserva Nacional Tambopata y a la Reserva Comunal Amarakaeri.

¿Qué se esta haicendo?

Con el objetivo de ordenar la actividad minera en Madre de Dios, el Gobierno emitió el Decreto de Urgencia Nº 012-2010, para garantizar una buena salud en la población, la seguridad de las personas, el pago de los impuestos, la conservación de los recursos naturales y el desarrollo de diferentes actividades económicas.
Posteriormente, y a través de la Resolución Ministerial Nº 046-2010-MINAM, se precisa el numeral 3 del artículo 2º y el artículo 8º, de manera que quedan prohibidas las unidades móviles que succionan materiales de los lechos de ríos, lagos y cursos de agua con fines de obtención de oro.

Fuente: SERNAP